Ecos del Subconsciente
En el abismo de la mente yace un mar sin fin, donde el inconsciente, en sombras, teje su confín. Silente arquitecto de sueños y de olvido, en su telar oculto, el destino es urdido. Bajo la luna del juicio, el alma se desvela, buscando en las estrellas la verdad que anhela. Hasta que el velo caiga, revelando la luz, el subconsciente guía, cual misterioso brujo. '¡Despierta!', clama el viento, '¡Rompe tu cadena!', que el oráculo interno no sea tu condena. Haz consciente lo oscuro, enfrenta tu temor, y en el espejo del tiempo, hallarás tu valor. No más sombras que dicten el paso a seguir, ni susurros furtivos que intenten confundir. Toma las riendas, forja con voluntad tu sendero, y al destino, que era oculto, nómbralo compañero.